¡Hola bellas! Una vez más pasa otro mes, y como es regla acá viene otra entrada del Reto Volver a los Clásicos 2015 que por allá por enero le propuse hacer a Dani del blog Alis volat propiis, y que sin darme cuenta me enamoró tanto que se me hizo corto. Así que sin demoras, vamos a la consigna de elegida para noviembre: Un clásico de no ficción. 

Si señoras: cuando no leo ficción o crítica, me encanta leer libros de correspondencia o diarios de escritores porque extrañamente me siento más próximamente a ellos. Por eso no dudé en elegir el Diario de viaje a París de Horacio Quiroga, una publicación póstuma -diría que demasiado-, pero que relata en dos libretas el viaje que hizo el escritor uruguayo a la capital francesa en el 1900 en el marco de la Exposición Universal. Además, este libro ofrece fragmentos de poemas inéditos que nunca fueron publicados

Este libro llegó a mi por mi obsesión con el tema parisino a principios de siglo y los relatos de viajes, pues en mi opinión estos develan elementos que a veces suelen pasar desapercibidos en las descripciones de lugares. En el caso de este relato, puedo decir que presenta una estilo muy íntimo que no sólo da cuenta de lo que el narrador ve, sino que lleva consigo todo el entusiasmo que produce el salir del hogar en busca de aventuras, y más si se trata de ir a la Exposición Universal de París, uno de los eventos más importantes de la época. Una vez llega a destino, el relato es una exaltación de la belleza, la gran cantidad de arte para ver y actividades para hacer.. pero conforme van pasando las páginas, París deja de ser esa ciudad estimulante que se le abre al mundo para ser un espacio limitado a aquel que tenga el dinero para gozarla. Es por ello que al final nos hallamos con un relato desencantado de la experiencia del viaje, de la bohemia, de todo.. pero que aún así, no deja de llevar consigo la poesía de aquel que transita por varios lugares, dejándose sorprender por lo nuevo y por la vida. ¿Recomendarlo? Si, pero si les gusta o se animan a leer este tipo de libros. ¿Releerlo? Si, de hecho, lo releí. 

Y así vamos: 

¿Conocían este libro?

¿Qué opinión tienen de Horacio Quiroga?

¡Nos vemos!